Para vos...

Nos encontramos en el lugar acordado. Ella vestía riguroso negro, con algunos toques de brillo y rojo. Como debe ser. Era demasiado joven para ser viuda. Su perfume es definitivamente raro, como si mezclaras colonia infantil con uno de esas pócimas de adulto. Quizás era ella la que emanaba eso, quizás era un símbolo de algo.
Nos sentamos en un banco, ya no recuerdo muy bien dónde, casi sin hablar, sólo mirándonos. En rigor, yo la miraba a ella que miraba a su vez el suelo. Si pudiera admitir que el suelo me miraba a mí hubíesemos hecho una transitiva perfecta. Pensando en eso le dije: cómo estás?
- ¿Cómo querés que esté?

Ok, lo acepto. Había sido una pregunta obvia, y, aún peor, mediocre. Me limité a actuar con mi cuerpo, a decirle con el lo que las palabras evidentemente no me facilitaban. Así comenzó nuestra única conversación.
En un momento levanté su barbilla, casi de cristal, inexistente entre el peso de la tristeza y su fragilidad. La orienté hacia el oeste.
- ¿Ves?
- No
- No importa. Ese es el punto. Hacia adelante.

Retiré mi mano y esperé. Podría volver a tener una respuesta brusca, levantarse o simplemente - lo que menos quería yo, de hecho- volver a mirar el piso. Había quedado como hipnotizada frente a la nada de las cosas. No me cabían dudas de que había comprendido. Me intrigaba qué conclusión sacaría de eso.
Abrió la boca, despegó sus labios y algo en ella quiso articular palabras. Finalmente, una voz suave pero firme dijo:

- Haré más que morir, viviré.

Sonreí para mis adentros. La chiquita había entendido de que la va todo esto.
No nos abrazamos ni nos dijimos nada más. Eso se lo dejábamos para los deudos ordinarios.
Se levantó y se fue taconeando de una manera grácil. Todavía no elegante, pero tampoco vacilante. Una caminata segura hacia una mujer que pondrá nerviosos a muchos.
Volví a sonreir. No tengo costumbre, pero es que ella...

13 comments:

Lamasput said...

Es lo único que te puedo dar. Espero te sirva...

Al resto les comento que estoy tapada de demasiadas cosas, pero ya volveré - pronto, espero- al ritmo acostumbrado.

La Mentirosa said...

Escribís Lamás..
Y escribis alto tan alto que a vos es imposible leerte sin escalarte.

Porque cada vez que paso para ver si actualizaste se me viene a la cabeza eso de : "eres como escribes, eres lo que escribes"

Y juro que volvería a vivir mil u una veces ese pasado reciente tan sólo para poder leer esto que salió de tu pluma al evocarme.

Aia!
Qué emocionada estoy!

Gracias!!!
Garcias!!!

"Escribir y vivir es una y la misma cosa"


(Permiso para agradecerte, enlace mediante, en mi próxima entrada)

Lamasput said...

No necesitás permisos, Menti, eso deberías saberlo.
Me reconforta que te gustara, esa era la idea...
Y no me elogies tanto!!

Anonymous said...

Entiendió de qué iba la cosa.

MALDITOASESINO said...

Esta preciosa vestida de negro y su olor te acompaña siempre.
Vivira, vivira.. ya vive

Las mentirosas de las amigas said...

Hola Lucía, vendo del blog de la Lola.

Es increíble, pero lo que contás es tal cual, sólo que vos lo escribiste como la más put madre!
A vivir girlsssssssssssssss, a vivir!

Las mentirosas de las amigas said...

vengo*

Marcelo said...

Excelnte encuentro perfumado de lila sobre fondo blanco.

Maru said...

Encabeza mi top five la Lola y se disputan el segundo puesto vos y el Ase.
Felicitaciones Lucía.

MALDITOASESINO said...

me quedo el tercero.. las damas siempre por delante

Lamasput said...

Estuve ausente unos días, vuelvo a mi solitario blog y qué me encuentro? Lectores!
Estas son cosas de la niña mentirosa :)

Bueno, las amigas: gracias gracias gracias! Y a vivir ustedes también!
Maru: me honra tomar parte en ese top five, sea en el puesto que sea..
Y ud., Mr. Murderer, es un caballero, ya lo sabía ;)

En fin, gracias a todos!!

Anonymous said...

se disputan el primer puesto a la putez barata loli y la mas put

Anonymous said...

CONNIE te necesito! en serio sé mia una noche y te dejaré irte para siempre de mi lado M

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